¿Podemos pensar en la reinserción de adolescentes en conflicto con la ley a través de la cooperación público-privada? Este viernes 21 la Universidad Católica del Uruguay (UCU) recibió a un panel integrado por representantes de ambos sectores para reflexionar sobre el tema. El ministro de Economía y Finanzas, Gabriel Oddone, el presidente de Inisa, Jaime Saavedra, el exdirigente sindical y asesor honorario del presidente de la República, Richard Read, la presidenta de ACDE, Elisa Facio, y el director de Recursos Humanos de Teyma, Jorge Penedo, intercambiaron sobre realidad de las personas privadas de libertad y su salida laboral una vez que cumplen sus condenas.
En plena discusión del Presupuesto Nacional, el presidente de INISA explicó que el organismo no necesita recursos, sino “ciertas habilitaciones jurídicas” para mejorar las condiciones de reclusión de los jóvenes. ¿El objetivo? “Que salgan del INISA para no volver nunca más”, dijo Saavedra.

Oddone en tanto, fue enfático en señalar que el crecimiento económico “no tiene ningún sentido si eso no se traduce en una mejor convivencia”. “Al final del día la economía va a crecer, los negocios se van a hacer, pero lo que tiene sentido es que la comunidad funciones; y la comunidad funciona cuando nos preocupamos por la cohesión social”, dijo.
Sus reflexiones fueron producto de las preguntas que realizaban la decana de la Facultad de Ciencias Empresariales, Isabelle Chaquiriand, y el director del Centro Berit, Agustín Labat, en un Auditorio Semprún al que asistieron empresarios, estudiantes, representantes del gobierno y de la academia.
El panel destinado al sector privado lo abrió Penedo en representación de la empresa Teyma, una organización que trabaja hace casi dos décadas con personas privadas de libertad. Penedo resumió el trabajo de Teyma en la reinserción social así: “Cuando existe un puesto que puede hacer una persona de sector vulnerable preferimos contratarla”. Según su experiencia, contratar a una persona que cumplió una condena ha resultado muy positivo. “Es hacer entender a todos que una vez adentro de la empresa somos todos iguales”, dijo.
La presidenta de ACDE, en tanto, contó cómo la asociación trabaja con organismos del Estado para la reinserción de jóvenes y adultos privados de libertad: “Trabajamos con personas que quieren un cambio de vida. Es un cambio de mentalidad, un cambio de mirada. Esta persona ya cumplió con la sociedad y no es menor esto de que cumplió su pena, porque si no le damos trabajo porque sospechamos lo seguimos castigando, y no es justo”.

Richard Read, por su parte, sumó al trabajo el valor de la educación. “No se pueden pedir resultados buenos de alguien que está todos los días bajo el castigo. La inclusión pasa por muchos lados, por un abrazo, por un afecto. Son chiquilines que están muy lejos del mimo y hay que mimarlos. Cuando una parte de la sociedad le da la espalda a la educación tenemos un enorme problema. Esa es la peor grieta”, reflexionó.






